Nuestro estudio, donde se puede observar qué es ZIMBRA: espacios abiertos y luminosos, materiales nobles, sostenibilidad, optimización, funcionalidad,
habitabilidad, accesibilidad, calidez y un criterio estético que lo unifica todo.

En este proyecto de acondicionamiento de bajo destinado a estudio, comienza con la demolición de los tabiques que compartimentaban el local, de la solera
que estaba afectada por capilaridad, y la apertura de grandes huecos en la fachada para permitir la entrada de luz natural.

Creamos un espacio de trabajo totalmente diáfano para facilitar la comunicación, donde se distinguen distintas zonas según su uso: recibidor, puestos de trabajo, mesa de reuniones, muestrario de materiales, reprografía, office con superficie de descanso y aparcamiento de bicicletas. Al fondo del local, tras un panelado en forma de cubo, un baño adaptado.

Destacan el solado de hormigón armado, pulido y pigmentado y el uso de madera combinado con acero al carbono. Todo lacado y barnizado empleando
acabados naturales y sostenibles.